Andábamos nervios@s por la llegada de un grupo de niñ@s de
Camboya afectad@s por las minas antipersonas que, ni más ni menos, se dedican
con su arte a transformar una situación que a cualquiera podría desbordar… tras
comer juntos en nuestra Casa hemos querido homenajearles y tratar de hacerles pasar
un buen rato con una pequeña exhibición… pero la sorpresa y momento irrepetible
nos lo han dado ell@s cuando se han puesto a cantar a capella y nos han deleitado con un exquisito baile mientras
asistíamos ojipláticos…
Ahora nos tocaría ir a nosotr@s a su país a ayudarles a transmitir alegría en un difícil entorno, seguiremos practicando hasta que llegue ese momento…
La prensa lo ha visto así:
- Salamanca RTV
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